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La precariedad en el cómic español

El 23 de abril, como cada año, se celebra el Día Internacional del Libro y los Derechos de Autoría y, a pesar de que es una fiesta en la que hay que acercarse a las librerías y a las ferias instaladas por todas partes, también es importante reflexionar y reivindicar.

La situación de los autores y autoras de cómic es muy grave, probablemente la más complicada de nuestra historia por múltiples factores. Para hablar de todo ello elaboramos un informe desde ARGH, la Asociación Profesional de Guionistas de Cómic en el que detallamos los problemas más importantes y planteamos una serie de propuestas hacia dentro y hacia fuera del sector para tratar de abordar una situación que hace años que se ha vuelto insostenible.

Pero, ¿cuáles son esos problemas?

Bastantes y muy definidos y puedes leer el informe completo o por partes siguiendo este enlace.

En resumen son:

La sobreproducción

Tenemos una cadena del cómic que se alimenta cada año con más de 4600 novedades y eso repercute de forma directa en la salud de toda la industria. A pesar de que se puede creer que a mayor número de novedades más bonanza económica para el sector, la realidad es otra.

Las librerías están saturadas y muchas de ellas al borde del colapso, las editoriales ya no saben qué hacer con la cantidad de devoluciones que reciben y las autoras observan cómo la promoción de sus obras es cada vez menor porque hay que dar espacio a las novedades.

La falta de oportunidades

Aunque el número de novedades sobrepasa las 4600, los títulos nacionales son cada vez menos. Nunca antes en nuestra historia se había publicado tan poco cómic español en España.

Las obras que hacemos directamente para nuestro mercado representan menos de un nueve por ciento del total de todo lo que se lanza.

Los autores y autoras noveles tienen hoy muchas menos posibilidades de entrar en el circuito comercial con sus obras que hace una década. Es más, nunca antes habían tenido tan pocas oportunidades.

La precariedad

Además de que cada vez es más difícil hacer cómics españoles en España, las condiciones en las que se hacen están muy lejos de garantizar una mínima dignidad para las autoras.

Un 63 por ciento del total reciben ingresos que quedan por debajo del umbral de la pobreza y les acercan a la exclusión social. Un 33 por ciento reciben menos de 1000 euros al año. De media la hora de trabajo para un autor de cómic en España se paga a 1’78 euros.

Esto obliga, en una gran mayoría de los casos, al pluriempleo, es decir, hacer cómics en España no es la primera actividad para los autores de cómic españoles. Hacemos tebeos en el tiempo libre que nos deja el otro trabajo. Y esto tiene varias consecuencias.

La fuga de talento

Una de esas consecuencias es la tendencia natural de irnos al extranjero a buscar las oportunidades que nuestra industria nos niega. Las autoras españolas buscan la forma de abrirse un hueco en mercados como el francobelga, el estadounidense, el coreano o el japonés.

Esto provoca varios problemas: pérdida de identidad y de patrimonio cultural, inseguridad jurídica, problemas fiscales, economía sumergida, explotación…

A pesar de que de cara a la opinión pública se celebra que los autores trabajemos y triunfemos en otros países, hay toda una realidad oculta tras los fuegos artificiales con situaciones flagrantes de desprotección y en las que muchas veces se nos utiliza como mano de obra barata con condiciones que los autores locales no aceptan.

Economía sumergida y desprotección social

Casi un 40 por ciento de las autoras españolas realizan su actividad dentro del mundo del cómic sin darse de alta en el régimen de autónomos, es decir, no cotizan nada por el trabajo realizado, aunque de media se invierte en realizar una obra entre 10 y 12 meses.

El empeoramiento de la salud mental

La gran cantidad de horas invertidas en el trabajo, el bajo rendimiento económico, la falta de protección social y cotización, y la obligación del pluriempleo, generan un caldo de cultivo muy propicio para la aparición de diferentes dolencias psicólogicas y psiquiátricas.

Pero a esto hay que sumar efectos derivados de la sobreproducción. Con el mercado saturado la comunicación con las editoriales es cada vez más pobre y la relación con las autoras es muy poco fluida y genera gran cantidad de incertidumbre. Las negociaciones contractuales se extienden durante meses, pero no porque se emplee ese tiempo en hablar sobre las condiciones, sino porque se entra en un bloqueo muy largo derivado de la enorme carga de trabajo editorial.

Además, la velocidad de la cadena de distribución obliga al olvido temprano de las obras ya que muchas veces apenas permanecen unas pocas semanas en los puntos de venta y eso también afecta al ánimo y a la salud emocional de los autores que observan cómo sus obras mueren antes de tiempo.

¿Qué se puede hacer?

Para tratar de cambiar la situación desde ARGH lanzamos una serie de propuestas dirigidas hacia el sector y también hacia fuera del mismo para tratar entre todos de construir un futuro mejor a corto y medio plazo.

Propuestas hacia el sector

1.- Reducir de forma considerable el número total de lanzamientos anual, protegiendo especialmente a la obra nacional y garantizando una mayor sostenibilidad de toda la cadena que reduzca la gran huella ecológica y social que supone la saturación del mercado.

2.- La puesta en marcha de una mesa de diálogo intersectorial que aborde las problemáticas internas y busque la mejora de las condiciones de las partes más precarizadas.

3.- El incremento del porcentaje de royalties habitual hasta el 14 por ciento como base y creciendo en función de las ventas.

4.- La asunción de todos los costes entre editoriales, librerías y eventos, incluyendo desplazamiento, alojamiento y dietas cuando los autores y autoras deban acudir a presentaciones, sesiones de firmas o cualquier otro evento relacionado con la promoción de una obra.

Propuestas relativas al desarrollo del Estatuto del Artista

5.- El reconocimiento de la intermitencia en el trabajo de modo que los períodos de inactividad no signifiquen períodos de desprotección, garantizando la acción protectora de la Seguridad Social. Se debe considerar el tiempo de preparación como parte de la actividad laboral y cubrir la inactividad con prestaciones de paro a partir de un número de días de afiliación.

6.- Establecer una cuota de autónomos progresiva que se suprima por completo cuando los ingresos sean inferiores al SMI y vaya aumentando en el momento que se supere ese baremo.

7.- Supresión del IRPF cuando los ingresos no superen el SMI.

8.- La creación de un epígrafe específico para historietistas en el IAE.

Propuestas legislativas concretas

9.- La trasposición de la DIRECTIVA (UE) 2019/790 del Parlamento Europeo y del Consejo de 17 de abril de 2019 sobre los derechos de autor y derechos afines en el mercado único digital, atendiendo fundamentalmente al derecho de remuneración adecuada y proporcionada haciendo que los autores y autoras reciban un pago justo por cada una de las horas invertidas en la creación de las obras.

10.- Desarrollar el artículo 64 de la Ley de Propiedad Intelectual en su apartado cuarto para establecer en qué condiciones se considera que las editoriales realizan una explotación continua de las obras cedidas y rescindir los contratos cuando no sea así.

11.- Desarrollar el artículo 64 de la Ley de Propiedad Intelectual en su apartado quinto para concretar de qué forma deben presentarse los certificados que determinen la fabricación, distribución y existencias de ejemplares y ampliar las consecuencias de no hacerlo.

Propuestas para instituciones

12.- La puesta en marcha de un sistema de ayudas integral coordinado con las diferentes asociaciones de autores y autoras.

13.- Poner en marcha un organismo de control cuyo único cometido sea velar por la transparencia en el sistema de distribución y que las cifras de ejemplares vendidos de cada obra sean de consulta pública tal y como ocurre en otros sectores culturales como el del cine.

Propuestas para otras asociaciones de autores y autoras

14.- Crear una federación de asociaciones que pueda actuar como representante frente al resto de actores y que garantice una mayor protección jurídica a la parte autoral.

Propuestas para una ampliación de los datos incluidos en el Libro Blanco del cómic en España elaborado por la Sectorial del Cómic

15.- Incluir los datos relativos a la labor de las empresas de distribución y las cifras de ventas de los títulos publicados.