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El entierro de las historias

Hoy es un día terrible, ¿lo es porque hace frío? ¿lo es porque sé que ya no voy a crecer más y me voy a quedar enano para siempre? No, nada de eso, hoy es un día horrible porque voy a enterrar varios proyectos y eliminarlos definitivamente de mi ordenador.

Sí, sé que es un drama, pero ¡no lloréis!, llegará un tiempo en el que surgirán nuevas ideas que llenen mi cabeza y mis pendrives como se llena de cereales un bol en casa del señor Kellog.

Antes de proceder con la ceremonia, el funeral y pulsar para siempre el botón de suprimir, me gustaría explicar algunas cosas sobre dichos proyectos y por qué he tomado esta difícil decisión. Para ello, como cada vez soy más ordenadito, he dividido el relato por secciones.

Vamos allá:

No es amor, es obsesión

Hay alguna de estas historias que la he llegado a ofrecer hasta a diez o doce personas diferentes. Siempre que me han pedido una «lista de ideas«, las he metido por ahí y son varios los anuncios que he puesto para tratar de encontrar pareja de baile para ellas.

Nunca han sido escogidas y eso hace que me plantee que quizás yo las valoro mejor de lo que son, que estoy cegado y magnifico los buenos detalles en detrimento de los malos.

No sé, estoy confuso, ¿sabes cuando conoces a una persona terrible, pero te resulta tremendamente atractiva? ¿sabes cuando te obsesionas con ella y te dices «yo podría cambiarla y hacerla bella»? ¿lo sabes? pues eres una personita enferma, no es bueno tratar de cambiar a la gente, hay que quererla como es.

Con los proyectos igual, me he dado cuenta de que varios de ellos son más una obsesión que otra cosa.

Las cosas inabarcables (como concepto)

Desde que empecé a hacer tebeos alrededor de 2011, hasta más o menos la mitad del camino, en 2014, era incapaz de comprimir las historias que quería contar. Todo lo que creaba eran volúmenes inmensos proyectados para 140, 160 o 180 páginas.

Escribía escaletas de 60 puntos con todos los pequeños detalles y después hacía 7 u 8 versiones de escaleta. Después hacía fichas de personaje, seguía con trabajo de worldbuilding sin tener ni idea de qué demonios era el worldbuilding y, finalmente escribía páginas y páginas de guion literario que pasaba a guion técnico y vuelta a empezar.

Cualquier pequeña historia, cualquier planteamiento interesante, se convertía en un monstruo gigante lleno de recovecos, giros, trucos, sorpresas, leña, acción y cosas súper interesantes y súper imprescindibles.

El resultado casi siempre era el mismo: nadie quiere embarcarse en un proyecto faraónico de un señor desconocido por mucho que ese señor te jure que es una obra maestra. Puede que esté muy bien escrito, pero da igual, plantear sagas, trilogías y álbumes de más de 150 páginas es bastante insensato en general.

Los planteamientos churreros

Hay dos maneras de llegar hasta un planteamiento churrero.

La primera es que sea un churro, una mierda, un pestiño, algo intragable, infumable, un asco, una cagada y así hasta el infinito…

Porque sí, todos los que escribimos, todos, sin excepción, tenemos días en los que redactamos un planteamiento que es un churro, el gran problema no es escribirlo, es pensar «bah, no está tan mal» o «seguro que dándole una vuelta queda algo estupendo«.

Cuando queremos hacer de un churro algo maravilloso es muy posible que acabemos haciendo una entrada en el blog dedicada a enterrar historias que no iban a ninguna parte…

La segunda manera de llegar a un planteamiento de este tipo parte de la expresión común de «hacer X como churros» (la X pueden ser un montón de cosas y los churros también se pueden sustituir por rosquillas).

En el caso que nos ocupa diré: «escribir planteamientos como churros«, en plan loco y salvaje, cuatro planteamientos por la mañana y cuatro por la tarde de lunes a viernes y durante todo el mes. Sin parar, como una fábrica de armas en Estados Unidos.

Aquí el problema no es ser muy productivo, es perder la claridad, dejar de discernir qué es bueno y merece pasar a la siguiente fase y qué es terrible y jamas debería haber sido escrito.

Ahora sí, las historias que pasan a mejor vida son

3, 2, 1, FIGHT!!! –  un equipo de luchadoras femeninas de Wrestling quieren llegar a participar en la Gran Liga del Norte, el torneo más prestigioso de lucha libre de su continente. A pesar de sus esfuerzos no consiguen alcanzar el nivel. Un día, en medio de un combate, una deidad, la Diosa del Orden, las escogerá como sus guerreras para un combate cósmico contra las elegidas por su hermana, la Diosa del Caos.

CIENTOS DE OJOS – Una chica que se dedica a la webcam erótica presencia un asesinato en un show privado para uno de sus clientes. A partir de ahí todo se complica ya que el muerto es en realidad un pleyadiano (o sea, un alienígena) y la chica se ve envuelta en una macroguerra intergaláctica entre diferentes razas del espacio.

CLASE F 121724-3 – Laila es una adolescente del siglo 22. Es de clase F y eso indica que pertenece a uno de los estamentos más bajos de la sociedad, es una proletaria al servicio de las demás clases y apenas puede disfrutar de tiempo de ocio. Dentro de ese tiempo, Laila es usuaria de un videojuego. Un día, mientras juega, descubre que hay una puerta trasera, un lugar en el juego que permite tener acceso a información clasificada. Desde ese momento Laila tratará de demostrar la verdad: toda sus sociedad es falsa, en realidad son el recuerdo de una serie de máquinas.

ALEISTER Y LA MESA DE SALOMÓN – Aleister Crowley viaja a España para buscar la mesa de Salomón y obtener su poder. Para ello iniciará dos trayectos, uno físico y otro astral a través de distintas épocas siguiendo la energía del objeto mágico para hallar su paradero actual.

ILNAVENTH – Cada 12 años las siete regiones de Ilnaventh organizan su campeonato de ladrones. Una prueba en la que siete representantes compiten por robar un objeto escogido por sufragio. La prueba de este año parece muy dura, ya que el objeto escogido es un grimorio místico que pertenece a Tal-Orn, el nigromante vivo de mayor prestigio.

LOS SUEÑOS DEL HOMBRE LOBO – Manuel Blanco Romasanta espera en una cárcel de Ceuta la hora de su muerte, ha sido condenado por varios asesinatos y además le han diagnosticado licantropía clínica, es un hombre lobo. Días antes de su ejecución un hipnólogo francés media en su nombre ante la Reina Isabel II pidiéndole que le deje hipnotizar al reo pues asegura haber curado a otros afectados por ese mismo mal. La Reina accede con una condición, quiere presenciar las sesiones.

MCMXC (1990) – Este es hasta demasiado largo de explicar… En el siglo tropecientos un grupo terrorista destruye casi por completo la ciudad de Berlín engañando a la policía robótica. Los pocos supervivientes que quedan de ese cuerpo llegan a una conclusión, la única solución es mandar a uno de ellos a 1990 para asesinar a varias personalidades: Nelson Mandela, Bill Clinton, Vladimir Putin, Manuel Fraga y Kim Jong Un

NAVEGANDO HACIA LA MUERTE – Benito Soto Aboal es condenado a muerte por sus fechorías y maldades cuando apenas ha cumplido los 25 años. Sin embargo su ejecución es una pantomima creada por los mandos ingleses. a cambio de su supervivencia le ofrecen resolver uno de los mayores misterios para la navegación de la época: el hallazgo del Galeón San José y sobre todo de su tesoro. Con una pequeña tripulación y en una expedición precaria, Benito se presta a cumplir el encargo pero descubrirá que el San José no se hundió ni por causas naturales, ni por efectos de una batalla, algo mucho más “oscuro” se ha tragado el barco.

Y ya está

Esta misma tarde a las cinco procederé a apretar el botón de eliminar para siempre estos proyectos (y otros ocho más que me daba una vergüenza tremenda compartir). Ruego que les dediquéis una pequeña oración o un momento de recogimiento.

Recomiendo que también hagáis limpieza de vez en cuando, al menos una vez cada lustro o cada sesenio.

Muchos besos y abrazos y disculpadme si estos días me veis más taciturno y nostálgico que de costumbre. Si alguien quiere enviar sus condolencias o un cheque o lo que sea que no dude en escribirme a fernando@guionistadebarrio.com

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